El blog de Benichio

Ha veces la vida es algo muy curioso, las cosas que te hacen bien pasan ha impedir que puedas alcanzar algunas metas, terminando incluso en perjudicarte. Pero es en esos momentos cuando eso que te puede perjudicar se queda a un lado. Es extraño ver como eso que nos ayudaba tanto de repente es un obstáculo y hay que abandonarlo. A veces el perjuicio puede no ser visible, otras veces lo es, pero uno mismo nunca se da cuenta. Es por ello que siempre ocurre algún hecho que te devuelve al camino. Al principio se puede hacer duro, pero poco a poco nos damos cuenta de que realmente es lo mejor. Cuando dejamos de lado lo que nos perjudica, nuestro nivel de vida vuelve a mejora. Conseguimos ser más felices, ya que nuestro cerebro y nuestro yo interior se centra en otras cosas. Esas cosas serán nuestras nuevas ayudas. Razones nuevas que conseguirán que volvamos a tener ilusión. Cambios notables que llegaran a conseguir que deseemos continuar. A veces debemos revisar nuestra vida y no tener

Hoy me siento agradecido, la razón de ello es que me voy empezando a dar cuenta que siempre existe una razón para conseguir algo. Siempre hay gente que nos anima y nos apoya. Puede que algunas de esas personas ya no estén en nuestras vidas. Pero su paso deja una huella especial, una marca que siempre está visible a nuestros ojos. A veces no nos damos cuenta de que nuestros logros no serian tan satisfactorios sino estuvieran nuestros familiares o amigos para celebrarlos con nosotros. Porque las alegrías no serían iguales sin ellos. Cuando compartimos las alegrías vemos que realmente no hemos sufrido solos. Hay gente que sufre cuando sufrimos y se alegran cuando nos alegramos. La vida es un viaje en el cual a veces pasas mucho tiempo en el mismo tren con los mismos pasajeros, pero también es una travesía imprevisible, nunca sabes quién se bajará o subirá en la próxima estación. Es una cosa irremediable, quizás por eso tenemos una memoria de tan larga duración, capaz de almacenar