La sonrisa del reflejo.

Siempre me ha gustado decir que el tiempo jamás se pierde. Es posible que a veces parezca que se ha perdido porque en cierto momento algún proyecto en el que hemos invertido parte de nuestra vida no ha salido como esperábamos.

Pero realmente eso es la vida, la vida no es planear y que todo salga tal como lo hemos previsto. Si fuese tan sencillo no tendría gracia vivirla. Sin embargo en lugar de eso nos pone obstáculos y trabas para que no pase lo que queremos sino lo que debe pasar y crezcamos con las vivencias.

Personalmente, me gusta a veces echar la vista atrás y recordar parte de mis proyectos fallidos o recordar como imaginaba mi vida hace años. De hecho, si vuelvo a mirar atrás hasta mis años de facultad, nada ha salido como yo lo planeaba. Toda mi vida ha sido bastante diferente, pero debo reconocer que a pesar de todo ha salido bien y he crecido y aprendido mucho por el camino.

Puedo decir que ha salido bien porque, a pesar de que no estoy donde planeaba estar, estoy donde necesito estar. Con el paso del tiempo he ido aprendiendo que, a veces, la vida no nos da realmente lo que queremos sino lo que necesitamos. Y es importante pararse un momento a mirarse en el espejo y ver si tu reflejo te sonríe. En el caso de que te sonría llevas tu vida por el camino que debe ir, en el caso de que no veas una sonrisa en tú reflejo, revisa tú vida encontrarás algo que te falta y cuando lo obtengas tu reflejo sonreirá.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Nuestra propia zancadilla.

Elegir el camino